Agricultor Carmelo Gálvez Ramos
Río Grande, Puerto Rico
Esa mañana, luego del huracán Fiona, fue un despertar difícil. Al ver cómo el esfuerzo, tiempo, dinero y sustento de toda mi familia, desapareció en pocas horas.
Siento impotencia y frustración al saber que todo el trabajo que he hecho por años se vino abajo. Solo le pido a Dios que me dé fuerza y salud para yo poder levantarme nuevamente.
Tengo la certeza de que Dios no me abandonará ni a mi familia. Si me levanté una vez, podré levantarme nuevamente”.
Para darle la mano a Don Carmelo y su Familia llame al 787-372-0298.
