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Este pasado viernes 28 de enero, una coalición de grupos antiimperialistas puertorriqueños y globales se reunieron frente a la oficina del alcalde en 250 Broadway a las 4:30 p. m. para exigir la derogación inmediata de los beneficios fiscales de la Ley 60 para los inversionistas que se mudan a la isla.
El mítin tiene la intención de resaltar la estrecha relación del alcalde Eric Adams con el beneficiario de la Ley 60, chico del cartel y multimillonario criptográfico Brock Pierce.
Aunque los incentivos fiscales de la Ley 60 han existido en Puerto Rico desde 2012 (anteriormente conocida como Ley 20/22), el auge de las criptomonedas, así como la actual crisis de la deuda, han hecho que la Isla sea atractiva para los inversionistas extranjeros adinerados ansiosos por cosechar beneficios en exenciones contributivas y convertir a Puerto Rico en un centro criptográfico.
La Ley 60 proporciona millones de dólares en exenciones de impuestos a inversionistas y empresas elegibles. Estas exenciones de impuestos no están disponibles para los residentes en la isla, y los economistas y los estudios han indicado que estos incentivos no brindan un crecimiento económico significativo en Puerto Rico, sino que aceleran rápidamente la gentrificación y el desplazamiento de los locales en la Isla.
Informes recientes de la periodista Bianca Graulau han demostrado cómo los beneficiarios de impuestos de la Ley 60 han comprado residencias asequibles que luego se convirtieron en alquileres de lujo, desalojando a los residentes de mucho tiempo.
Una de las figuras clave en la escena de las criptomonedas en Puerto Rico es el multimillonario Brock Pierce. Pierce, un notorio entusiasta de las criptomonedas, se ha embarcado en una ola de compras de tierras PUERTORRIQUEÑAS.
Recientemente compró un hotel frente al mar de 150 habitaciones en Vieques y ha comprado edificios históricos en el Viejo San Juan.
Brock Pierce es particularmente cercano al alcalde de Nueva York, Eric Adams. Adams viajó a la conferencia SOMOS patrocinada por los demócratas en el avión privado de Brock Pierce, a pesar de la reputación de Pierce como cripto colonizador en la Isla. Pierce también donó $100,000 a un comité de acción política que apoyó la candidatura a la alcaldía de Adams.
El propio Eric Adams convirtió su cheque de pago más reciente en moneda criptográfica y planea convertir la ciudad de Nueva York en un «centro de Bitcoin».
La portavoz de New York Boricua Resistance, Gabriela Malespin, señaló cómo“los multimillonarios criptográficos como Brock Pierce tienen la intención de comprar tierras puertorriqueñas y desplazar a los puertorriqueños del archipiélago a un ritmo alarmante. A pesar de que los puertorriqueños de clase trabajadora dieron a conocer sus sentimientos sobre estos colonizadores de la Ley 60 varias veces, estos se niegan a irse y tienen la intención de convertir la isla en un «Puerto Rico sin puertorriqueños».
La estrecha relación de Adams con Brock Pierce, particularmente como alcalde de Nueva York, una ciudad con una de las concentraciones más altas de puertorriqueños en los EE. UU., es prueba suficiente de que no es amigo de la clase trabajadora y ciertamente tampoco de la comunidad puertorriqueña en Nueva York.”
La portavoz de Colectiva Solidaridad, Cyn Rodríguez, destacó cómo los puertorriqueños tanto en la diáspora como en el archipiélago están listos y movilizados contra la marea de beneficiarios de la Ley 60.
“Si bien el gobierno de Puerto Rico tiene la intención de vender la isla al mejor postor, reconocemos que hay mucho en juego. Vamos a perder a Puerto Rico si no derogamos estos beneficios fiscales de la Ley 60. ¡Es hora de que las organizaciones antiimperialistas puertorriqueñas (tanto en la isla como en la diáspora) monten una campaña agresiva para derogar los beneficios contributivos, devolver tierras al pueblo y luchar por la independencia de Puerto Rico!
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