Seguridad
JAIME TORRES TORRES
Prensa Sin Censura
El proyecto de la Cámara 321 de la autoría del senador y trovador Fernando Sanabria ha sido convertido en ley por la gobernadora Jenniffer González: rigurosidad con los asesinos potenciales que manejando en estado de embriaguez provoquen muertes en las vías públicas del País.
La pena de cárcel será obligatoria y conforme a sus enmiendas anula las sentencias suspendidas o discrecionales. En otras palabras, si borracha o borracho ocasionas una desgracia irás derechito a la institución penal.
Prensa Sin Censura reconoce que la ley firmada por Jenniffer González es posiblemente el mayor acierto de las que ha firmado tras casi un año en la gobernación.
Las muertes provocadas por conductores ebrios son la norma durante cada año, pero se multiplican en Navidad.
La incidencia es mayor desde que escasea el patrullaje de los agentes de la División de Tránsito de la Policía en las carreteras del País.
Puerto Rico es un país alcoholizado. Dondequiera, por distintas razones, la gente empina el codo.
En semanas recientes una joven madre y su bebé de dos meses perdieron la vida al su vehículo ser impactado de frente por un conductor ebrio en la PR-137, jurisdicción de Morovis.
Con la “Ley para hacer Justicia a las Víctimas de Conductores bajo estado de Embriaguez y otras Sustancias Controladas” se enmienda el Artículo 2, de la Ley Núm. 259 de 3 de abril de 1946, a los fines de imponer la sentencia de reclusión en todo caso de delito grave y todo caso de delito menos grave que surja de los mismos hechos.
“Esta Ley se presenta en defensa de personas como Justin Rafael Santos y las hermanas Esther Raquel y Eunice Raquel García Vázquez, y de sus familiares y amigos. Justin Rafael Santos, un joven que se distinguía como asistente de tarima y coordinador de presentaciones, tenía el sueño de emprender en la industria del entretenimiento, con el objetivo de gestionar la carrera artística de su hermano, conocido como Arcángel. Su vida fue trágicamente arrebatada cuando fue impactado por una conductora bajo los efectos del alcohol, quien transitaba en dirección contraria en el puente Teodoro Moscoso, mientras se dirigía a su hogar”, versa el proyecto de Sanabria convertido en ley por la gobernadora.
Según la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras (NHTS por sus siglas en inglés) del Departamento de Transporte de los Estados Unidos, cada día, alrededor de 37 personas mueren en choques automovilísticos relacionados con el alcohol; en otras palabras, cada 39 minutos una persona muere por esta causa.
“En Puerto Rico, toda persona que consuma bebidas embriagantes, drogas o sustancias controladas, mientras conduce un vehículo de motor, comete delito. La evidencia científica y estadística demuestra que el alcohol deteriora la capacidad motora, cognitiva y de reacción, aumentando significativamente la probabilidad de causar un accidente con consecuencias fatales […]”, abunda la nueva ley.
El estatuto fue ratificado el martes 2 de diciembre y ya entró en vigor.
Prensa sin censura 