Editorial
JAIME TORRES TORRES
Prensa Sin Censura
No le corresponde a campamento ni a figura política alguna, con excepción del alcalde, de sus constituyentes y los legisladores por el Distrito 36, intervenir en la polémica en torno al acceso al bien de dominio público La Barrigona del Río Mameyes en la comunidad Barcelona de Río Grande.
Desde 2022 Prensa Sin Censura cubre las restricciones de entrada a este paradisiaco lugar después de las 3pm por una carretera estatal cuya delimitación ahora mismo está en controversia por contradictorias certificaciones del Departamento de Transportación y Obras Públicas y la Autoridad de Carreteras.
En 2022 visitamos el lugar, incluso meses después en compañía de la entonces representante del Movimiento Victoria Ciudadana, Licenciada Mariana Nogales Molinelli, que llegó a reunirse con el dueño de Junglequi Zipline, Melvin Urbina, a quien este periodista independiente de 40 años de experiencia le tuvo que soportar comentarios difamatorios e innuendos pronunciados delante de la legisladora y su ayudante. como “independentista, revoltoso y mariguanero”.
En esos días también llamamos a la YMCA para entrevistar a su directora Mabel Román Padró, quien nunca devolvió las llamadas, lo cual fue documentado.
De igual forma hasta le preguntamos al alcalde de Río Grande Angel ‘Bori’ González Damudt si conocía de la incomodidad de los vecinos de la comunidad Barcelona con el cierre de un portón en la PR-990 cerca de las 3pm. Su respuesta, a pesar de la importancia de precintos como Colinas del Yunque, La Vega y Barcelona, fue que supuestamente desconocía.
En 2022, ante la falta de consenso entre la comunidad y el hecho de que no progresó la gestión legislativa de Nogales Molinelli, Prensa Sin Censura optó por no cubrir más el asunto.
Este verano, sin embargo, se asomó a la escena de la combatividad por el acceso a La Barrigona el ciudadano Reynaldo Pons, quien junto a cuatro personas con propiedades en Barcelona removió el portón con que Junglequi Zipline cerraba al concluir operaciones alrededor de las 3 p.m.
Desde entonces ha trascendido que el estacionamiento en terrenos de la YMCA en que Junglequi cobra $5 por auto operaba sin permisos, según confirmó a Prensa Sin Censura una fuente de entero crédito del Departamento de Asuntos del Consumidor (DACO) que visitó el lugar.
En el pasado, previo a que la YMCA arrendara los terrenos a Junglequi Zipline, el lugar era tierra de nadie: acumulación de basura, fechorías, violaciones, desmantelamiento de carros, etc.
La administración de Junglequi ha establecido cierto orden, pero de manera arbitraria e impositiva, sin considerar e involucrar necesariamente a los visitantes y a los vecinos, salvo algunos, incluso uno que le facilitó acceso al servicio de agua potable del pozo de la comunidad.
“Siempre ha sido nuestro río; siempre ha sido libre; siempre hemos bajado con nuestros hijos; ahí se criaron; ahí nadaron”.
Jenny Rosario
En meses recientes la gobernadora Jenniffer González firmó una orden ejecutiva para reconstruir viviendas en terrenos colindantes a El Yunque. Y en la ruta por el Río Mameyes en la PR-990 [hoy 993, tanto en Río Grande como en Luquillo] hay alrededor de docena y media [El Bosque Nacional El Yunque tiene jurisdicción en Canóvanas, Río Grande, Luquillo, Fajardo, Ceiba, Naguabo, Las Piedras y Juncos] de estructuras e inmuebles abandonados. ¿Quién será el mejor postor?
En la tarde de este jueves 28 de agosto de 2025, la Resolución del Senado 274, del senador independiente Eliezer Molina que ordenaría una investigación exhaustiva sobre el acceso público al Río Mameyes en la PR-993 [antes 990], fue aprobada.
Cuando inicie la investigación no hay duda de que se abrirá una Caja de Pandora porque la PR-990 [hoy 993 sin rotular] tiene jurisdicción en el Barrio Mameyes de Luquillo, donde incluso se llegó a edificar otro portón para impedir el acceso a la zona donde hay terrenos del convicto federal Walter Pierluisi, identificados como Atardeceres del Yunque.
Al final del día, los vecinos, incluso la señora Nereida Cruz, madre de Reynaldo Pons, lo que quieren es que se les permita acceso a la zona del Río Mameyes aledaña a Barcelona.
“Reclamamos el derecho que nos corresponde como comunidad del Barrio Barcelona. Siempre ha sido nuestro río; siempre ha sido libre; siempre hemos bajado con nuestros hijos; ahí se criaron; ahí nadaron y desde que está este señor aquí [en alusión al administrador del negocio] ha sido un problema”, dijo la señora Jenny Rosario.
Este periodista y ciudadano, al menos dos veces a la semana, visita distintos lugares de El Yunque para recoger basura de los cauces de los ríos Mameyes, Espíritu Santo, Sabana, Fajardo, Blanco y Canóvanas. El lector lo podría hacer hoy y si regresa pasado mañana llenaría otra bolsa de desperdicios como botellas, plásticos, pañales, aluminio, etc.
“Yo llegué a hablar con él [con el Sr. Urbina]. Le sugerimos que le daríamos 10 drones y no quiso. Es una persona que no es de aquí”, dijo la señora Cruz.
Algunos vecinos de la comunidad están insatisfechos con la personalidad y estilo fogoso de Reynaldo Pons y con su presunta renuencia a negociar con los funcionarios de la YMCA que han visitado o se han comunicado con residentes del barrio.
Días atrás, en un hecho intimidante y sin precedentes, se destacaron agentes de la policía en la carretera estatal PR-990. Ya al parecer no están y alegadamente se permite acceso a la carretera estatal hasta donde termina en el río.
Para el próximo 30 de agosto se promueve una visita masiva al charco en los terrenos de YMCA arrendados a Junglequi Zipline.
Irrespectivo de los hallazgos de la investigación senatorial, la solución de la controversia dependerá, sobre todo, de civismo, diálogo y voluntad.
¿Qué estipulan las leyes?
La Ley de Aguas de Puerto Rico establece y corresponde citar: “Define la propiedad de dominio público y dominio privado sobre álveo o cauce natural de las aguas, fondo de los lagos, lagunas o charcas. Define las riberas o las fajas laterales de los álveos, señala que, en situación de ser de dominio privado, existe una servidumbre de uso público en interés general […] y una zona de tres metros en la extensión y márgenes de la ribera, sujeta a ensancharse y estrecharse de ser necesario para interés público”.
La Ley para la Conservación, el Desarrollo y Uso de los Recursos de Agua de Puerto Rico, la Número 136 del 3 de junio de 1976, estipula que entre los bienes de dominio público marítimo-terrestre “se incluye la ribera del mar y de los ríos”.
En los terrenos de propiedad privada en la zona marítimo-terrestre por gravamen legal se deberá constituir “una franja de 20 metros de ancho contados hacia el interior de la tierra desde la delimitación de la zona marítimo-terrestre”.
También la ley ordena que “en los pasajes de tránsito difíciles o peligrosos podrá internarse la vía o franja a más de 6 metros”.
Como colofón del presente Editorial, Prensa Sin Censura recomienda:
• Que el administrador y dueño de Junglequi Zipline sea más amable y asertivo.
• Que la comunidad se organice e involucre, junto al negocio, en la protección del lugar, que incluso desde hace años dispone de una servidumbre de paso para llegar a La Barrigona.
• Que a las 5pm entre septiembre y abril y a las 6 pm entre mayo y agosto se cierre el acceso con una cadena para evitar que gente inescrupulosa cometa fechorías en el lugar por lo solitario y apartado que es.
• Que el alcalde asigne a la guardia municipal de Río Grande para rondas y vigilancia.
• Que los residentes coordinen junto a los comerciantes el mantenimiento del lugar.
• Que se contrate un salvavidas porque La Barrigona tiene áreas profundas.
• Que se habiliten otras veredas para llegar a otros charcos como Las Brujas y El Convicto.
• Que se protejan los árboles de la reserva y la biodiversidad.
• Que YMCA, Junglequi, el Municipio y la comunidad Barcelona coordinen esfuerzos en aras de proteger el recurso natural.
• Que la ONG Amigos de El Yunque no se desatienda y dé la mano.
• Que la administración del Servicio Forestal Federal sea más proactiva a la hora de involucrar a los residentes y vecinos de todas las comunidades localizadas en el Bosque Nacional El Yunque.
- Que la ONG Para la Naturaleza se mantenga al margen.
- Que se entienda que La Barrigona es de Barcelona, Río Grande y del Pueblo de Puerto Rico.
Fotos/suministradas
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