La salud es un derecho, no un privilegio de los que tienen dinero

Justicia Social

JAIME TORRES TORRES

Prensa Sin Censura

Es la historia de Yania, una chica de 26 primaveras que ha pospuesto sus sueños de estudio y trabajo tras una inesperada emergencia de salud, a la cual su seguro médico privado [MCS] no ha respondido como esperaban después de pagarlo por varios años.

No necesitan promociones de vales para recortes de cabello ni mantenimiento al hogar ni boletos para conciertos ni pases a cenas en restaurantes. Lo que necesitan es acceso a un tratamiento decente y no oneroso a su bolsillo.

La madre de Yania Castillo, la señora Albita Quiñones Seijo, explicó que la odisea comenzó el domingo 8 de junio, cuando su hija tuvo que ser trasladada de emergencia al hospital, luego de quejarse durante dos semanas de un fuerte dolor en el área del coxis.

“Le dio una fiebre muy alta y se le inflamó el área y salimos de emergencia. El médico que nos atiende en el Doctor’s Hospital de Carolina nos dice que tenía un quiste gigante y tuvo que intervenirla de emergencia. El hueco que tiene mi niña es más grande de lo que se esperaba porque al llegar la infección al hueso hubo que abrir mucho. Es una herida de 8 centímetros de largo, 7 de ancho y 4.5 de profundidad, tanto que cabe una bola de softball”, narró con pesar la señora Quiñones Seijo a Prensa Sin Censura.

Al la herida quedar abierta, Yania necesita el equipo ‘vac system’ para succionar y sanar de adentro hacia afuera. Sería un tratamiento de varios meses en el hogar, pero MCS le dijo que estaba fuera de su cubierta y que debía pagar por el alquiler del equipo entre $1,000 y $1, 500 diarios.

“Sin ese equipo su piel no se regenera rápido y demora como un año en curar. Y se queda con el espacio abierto. El plan lo denegó por la cubierta que mi hija tiene, que no cubre esos equipos. Tristemente, pagas un plan tantos y tantos años; que no se utiliza para nada, y cuando tenemos una emergencia que en verdad lo necesitamos no lo despachan. Eso es algo inhumano. Entiendo que ese equipo es vital para salir del hospital y tener una recuperación de cuatro a seis meses”.

Desesperada, la señora Quiñones Seijo ventiló su calvario en las redes y en este medio independiente. 

“No podía sacar $30 mil mensuales para pagar este servicio. Yo recibo mi pensión. Mi hija no está trabajando. Para nadie que sea de la clase media, como nosotros, es costo efectivo conseguir $30 mil o más mensuales. Eso es para millonarios nada más”.

Tras dilucidar su desesperante situación en las redes, MCS la llamó para decirle que se lo aprobaban solo por un mes con un deducible de casi $800.

“Aprueban la máquina por un mes, pero aún así ellos [MCS] solo van a cubrir el 30% y yo tengo que pagar casi $800 de deducible para que venga la compañía con la máquina. No es eso: no puedo usar tarjeta de crédito. Solo es en efectivo. ¿Ellos piensan que todo el mundo tiene $800 para soltarlos en el momento?”

La señora Quiñones Seijo ha llorado, no ha dormido, se ha desvelado y se siente muy ansiosa por la incertidumbre, respecto la salud y el bienestar de su hija Yania.

“Tuve que acudir a las redes, no me gusta eso, pero lo tuve que hacer. No le pedimos dinero a MCS, sino que aprobaran el equipo y nos dieran una alternativa viable y real para tener a mi hija en la casa porque de lo contrario tendría que permanecer en el hospital y cada día que pasa es costoso. ¿Qué les saldría más costoso? ¿Un año en el hospital o que nos proveyeran la máquina?”

La madre de Yania Castillo terminó dirigiendo un mensaje al Dr. Víctor Ramos, secretario de Salud. “Mire como está de precaria la salud de este pueblo. Somos muchas las familias las que pasamos por esto. No lo entendemos hasta que no estamos en esos zapatos. Necesitamos salud de buena calidad. Salud que no se tenga que suplicar. Salud que no es un regalo. Es un derecho que tenemos los puertorriqueños. Sin salud, no podemos subsistir. Secretario, usted tiene que de verdad sentarse a hablar con la gente de los planes médicos y buscar una alternativa donde podamos tener un plan médico que sea favorable y tener salud de calidad”.

Anoche la Sra Quiñones Seijo publicó en sus redes

¿Alguno de mis contactos que me pueda ayudar con un contacto de un médico o enfermera especializado en manejo del dolor en el hogar? Mi hija ya está en mi hogar y no ha podido dormir ni descansar nada. Ha estado a gritos y lágrimas. Solo le dieron una pastilla para el dolor cada 12 horas y no le hace nada de nada. Necesito que vengan a mi hogar a ayudarle. Esto que ha pasado ha sido muy fuerte. Nadie pero nadie debe vivir con dolor.

Además, si alguien tiene un monitor de bebé que no esté utilizando y me lo pudiera prestar. De esta manera puedo moverme en la casa y escucharla.

Se los agradecería de todo corazón.

Sugerimos discreción con parte de las fotos publicadas.

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