Buenos días, Thomas Rivera Schatz:
Ayer en la tarde me hicieron llegar tu mensaje, fiel reflejo de tu estilo: uno cargado de sarcasmos, desinformación, mentiras, estupideces y tonterías, todo ello impregnado de esa arrogancia y sentido de superioridad sobre otros que tú siempre has sentido.
Podrás engañar a muchos del liderato religioso de Puerto Rico y a mucha gente, pero a mí no me engañas. Te conozco muy bien desde hace tiempo. Comenzamos juntos en la política allá a principios de los años 2000 y, fíjate, no has cambiado en nada. Sigues siendo el mismo manipulador que está acostumbrado a engañar, mentir y traicionar cuando se trata de alcanzar tus fines. El mismo que le falta el respeto constantemente a todo el mundo a través de sus escritos cafres en las redes sociales y a través de mensajes como aquel que pusiste en los billboards días antes de las elecciones. El mismo mentiroso que se atreve a decir que yo fui popular, cuando ustedes saben bien que nunca lo he sido.
Eres [Thomas Rivera Schatz] un nómada de pareceres, ideales y de supuestas convicciones, un camaleón político que cambia constantemente de acuerdo a su conveniencia. Y a pesar de que fuiste beneficiado en unas elecciones, eres un derrotado de la vida.
Javier Jiménez
Llevas 20 años como legislador y, de momento, te levantaste un día y te sentiste conservador, comenzando a radicar los proyectos que nosotros propusimos en la pasada campaña. ¿A quién crees que engañas? Si hubieras creído en ellos, los habrías radicado en los 20 años que has estado en la legislatura, ocho de ellos como Presidente del Senado. En el cuatrienio 2016-2020, inclusive radicaron un proyecto de libertad religiosa en el Senado y se lo asignaste a una senadora, a quien aprecio mucho, para que muriera y no te echaran la culpa a ti. Sigues siendo el mismo que miente y que finge sentir cosas que no siente, que traiciona al que haya que traicionar y que respalda lo que haya que hacer para lograr sus objetivos. Estoy seguro de que poco te importan esos proyectos. Te conozco bien, Thomas, y desde el principio leí tu mapa. Conozco tu estrategia:
* Apropiarte de las propuestas del partido que quieres destruir.
* Reclutar a alguna persona vocal de ese Partido para que sea tu portavoz.
* Sembrar la discordia y lograr su desaparición.
Y de las cosas más mezquinas que hiciste, pero que no me sorprende de ti, fue utilizar a esos pastores para ponerlos en un vídeo a darte las gracias y luego subirlo en tu página. ¡Qué bajo eres, Thomas Rivera!
Tu actuación en la confirmación del Secretario de Salud te quedó brutal, porque representa exactamente lo que eres. Por un lado, lo confirmas como Secretario y, por otro lado, das un discurso para hacer ver que no estás a favor de ese nombramiento. Una táctica muy parecida a la que hiciste en las primarias del PNP. Públicamente respaldaste a Pierluisi y, por otro lado, enviaste a tu gente a ayudar a Jennifer. Por eso el respaldo de Jennifer hacia ti días antes de las primarias.
Eres un nómada de pareceres, ideales y de supuestas convicciones, un camaleón político que cambia constantemente de acuerdo a su conveniencia. Y a pesar de que fuiste beneficiado en unas elecciones, eres un derrotado de la vida.
Te deseo que tengas feliz semana.
Javier Jiménez

