La construcción de carreteras en cemento es una de las iniciativas que más orgullo le genera al alcalde de Cayey, Rolando Ortiz Velázquez. Sin embargo, por muy buena que sea la iniciativa, hay que darle seguimiento y mantenimiento. Es disonante que el alcalde siga destacando las carreteras en cemento como una de sus mejores obras, sin embargo están en completo deterioro. No solo se observa en la calle Ramón Frade, ubicada en el casco urbano cayeyano. Son muchas otras calles y carreteras en los campos que corren la misma suerte: el abandono.
Rhina M. Jiménez
Periodista independiente

