JAIME TORRES TORRES
Prensa Sin Censura
Estamos ante posiblemente el disco del año producido por un talento puertorriqueño.
Jubilation de Giovanni Hidalgo supera todas las expectativas y revela el bagaje, el conocimiento, la comprensión de la tradición del blues y el compromiso de Giovanni con la excelencia, demostrando que no sólo es un virtuoso de la clave afrocaribeña, sino un conocedor del lenguaje jazzístico en general.
Con Jubilation Giovanni se consagra para la posteridad con uno de los lanzamientos más excitantes de todos los tiempos. Este concepto será distribuido físicamente por el Instituto de Cultura Puertorriqueña y su disquera, pero hace una semanas está disponible digital en portales como Amazon Music.
Esa es la versión que ha patrocinado Prensa Sin Censura y tras la primera audición es sin duda alguna un disco obligado para el amante del jazz promedio, para los seguidores de la carrera de Giovanni, los simpatizantes de la tradición y sobre todo los estudiantes de jazz.
Es una secuencia de una docena de selecciones que en su mayor parte se remontan a varias décadas atrás. Un repertorio selecto que, como hemos reseñado, revela el conocimiento y el caudal de información de Giovanni, con el resultado de una complaciente y muy satisfactoria experiencia durante la cual se aprecian su creatividad y sensibilidad artística en el abordaje o la interpretación de la colección de estándares del jazz, en particular del blues.
Jubilation es una evocación de Paul Anka y Plenty, Plenty Soul de Milt Jackson en 1957. Soul Turnaround conecta con Walter Bishop; Whisper Not invita a recordar las versiones de Ella Fitzgerald, Art Blakey y en años recientes de Roy Hargrove. Work Song es una nostálgica alegoría de Nina Simone; Idle Moments de Grant Green y no faltó la herencia afro cubana de Canta bajo de Mongo Santamaría y su álbum con La Lupe del umbral de la década del 60.
Willow Weep For Me es otra melodía inmortalizada por Nina Simone y también por Billie Holiday. Giovanni incluye Saoco del álbum Brujerías de Cándido Camero y How Long, How Long Blues del guitarrista Leroy Carr.
La irresistible audición, comparada con un viaje intergaláctico por el infinito espacio sideral del jazz, finaliza con Is Not She Lovely de Stevie Wonder y con la descarga Giovanniology, el colofón de una experiencia comparable también con un curso intensivo en tradición jazzística en pleno 2024.
Jubilation, amigas y amigos, es un álbum fuera de serie, rico en solos y provisto de una orquestación y elaboración armónica sin parangón en el jazz contemporáneo cultivado por talentos boricuas, en el que no faltan elementos de la música electrónica y alguito de inteligencia artificial.
Desde las tumbadoras y otros instrumentos de percusión, Giovanni ejerce el rol de acompañante, demostrando que en ocasiones ni es necesario el comping de la batería.
De principio a fin destila swing, mucha improvisación; elemento indispensable del jazz, en el marco de un concepto de una musicalidad suprema con abundantes solos de piano, saxofón, guitarra, contrabajo y trombón.
Tras lanzamientos previos como Villa Hidalgo, Worldwide, Time Shifter, Hands Of Rhythm y Silver Gold, es menester consignar que Jubilation no solo pasará a los anales de la historia como su obra maestra, sino como uno de los cinco discos de jazz de todos los tiempos en Puerto Rico.
Jubilation es testamento de la inconmensurable aportación de Giovanni Hidalgo al cancionero jazzístico internacional.
Los músicos son José Ortiz (batería), Giovanni Ortiz (contrabajo), Joseph Rivera (piano), Emilio Méndez (teclados), Janice Maisonet (saxofón tenor), Humberto Ramírez (trompeta), Juan Aldahondo (guitarra), Phil Adams (trompeta y flugel), Juanga Lakunza (trombón), Les Rogers (trompeta), Karen Stachel (flauta) y Norbert Stachel (arreglista).
Funkeao a veces con scats cuasi subliminales, Jubilation se ha convertido en mi disco favorito y no me canso de escucharlo, descubriendo en cada audición nuevos matices y expresiones.
Prensa sin censura 