Nota del Editor: Artículo publicado el 20 de septiembre de 2024.
JAIME TORRES TORRES
PRENSA SIN CENSURA
Hubo un tiempo en que no poca gente admiró su suspicaz e incisivo estilo de abordar a sus entrevistados.
Era la época en que cargaba sobre sus hombros a Noti-Uno, en tiempos en que Radio Reloj 580, la Escuelita, dictaba pautas en la radio noticiosa del País y era el medio en que todos querían trabajar.
Varias veces lo vi llegar con camisa y corbata al Hipopótamo, acompañado de colegas periodistas como Nelson del Castillo y José Delgado.
Su jaquetona proyección ante el micrófono le mereció buen rating en la temporalidad colonial que privilegia más el espectáculo que el ejercicio serio de la profesión.
Siempre lo conocí como periodista, pero de un tiempo al presente él prefiere identificarse como ‘presentador’.
No olvido cuando me llamó a la redacción de El Nuevo Día a insultarme porque en la sección Cápsulas Radiales publicamos una nota de su desempeño que no resultó de su agrado.
Jamás volví a coincidir con el presentador hasta que en años recientes transmitió su programa desde la alcaldía de Loíza, por el que Univision Radio facturó y el contenido fue, pagado al fin, liviano.
Recuerdo el tema de la conversación fuera del aire con el colega Pepo García, este ejerciendo el rol de relacionista profesional, en torno a su salario y sus ganancias por su trabajo en la icónica estación de noticias.
En Radio Reloj, luego Univisión Radio y hoy WAPA Media, el ego escaló alturas insospechadas. Hubo una mujer noticia y también un “macho de la información”. Sí, Rubén Sánchez personifica el poder masculino en la era de la espectacularización de la noticia.
Engreído.
Prepotente.
Cínico.
Sarcástico.
A veces sensacionalista.
Todo lo opuesto al perfil de un buen Periodista.
Sepultó en el pasado su correcta proyección ante el micrófono y su honroso desempeño de la profesión que le merecieron buen standing como entrevistador en debates televisivos de pasados procesos electorales.
Su fama de malcriao se traduce en rating porque es la imagen de niño malo que ha forjado y que no pocos aplauden en un sistema colonial en el que la noticia se reporta como un chiste.
El debate primarista del PPD fue el primer exabrupto. Parecía ensañado con Juan Zaragoza y tras bastidores mandó al k-ra-Jo a la ex secretaria del Departamento de la Familia Idalia Colón Rondón, directora de campaña del senador popular y ex secretario de Hacienda.
El segundo papelón ocurrió hace unos días durante una entrevista con el licenciado Humberto Cobo Estrella, candidato a la alcaldía de Carolina por el Partido Nuevo Progresista.
El video se fue viral y aunque hay quienes dicen que es publicidad, lo cierto es que es un soberano bochorno y una cósmica vergüenza para el Periodismo puertorriqueño.
Con y por menos, otra gente ya hubiera sido relevada de sus funciones. Pero a WAPA Media parece que le importa más la facturación por un show en que es evidente que el presentador afronta problemas de salud y control de sus emociones. La gente sintoniza preguntándose : ¿cuál será el papelón de hoy?
Sólo un ‘Hombre Noticia’ reacciona iracundo si un entrevistado le dice que lo ofende y le falta el respeto. El incidente lo escuchó y vio todo Puerto Rico y también los boricuas del exilio o la Patria extendida en Estados Unidos.
Los gremios de prensa están callados y la gerencia de WAPA Media no se da por aludida.
Los papelones de Rubén Sánchez cansan. Es la caricatura, tal vez mueca, de un entrevistador. Deshonra la frecuencia del 580 AM y su dorada trayectoria y tradición en el Periodismo radial. El modelo del presentador Rubén Sánchez, desde sus recientes papelones, es una burla a los estudiantes de Periodismo.
¡Rubén Sánchez necesita ayuda y es YA!
(Esta es la opinión editorial de Prensa Sin Censura, suscrita categóricamente por su Editor: Jaime Torres Torres)
Prensa sin censura 