JAIME TORRES TORRES
Periodista y Editor
PRENSA SIN CENSURA
Ya los padres se cansaron de la ambivalencia de Ana Villanueva, propietaria y directora de Caguas Private School, con una matrícula de 860 estudiantes de elemental a cuarto año que se exponen a problemas de salud con la humareda de la cremación de cadáveres de una estructura vecina al plantel.
Madres, padres, oficiales de seguridad, transeúntes y residentes ya no soportan el humo y las emanaciones del rancho de incineración de fallecidos que administra la corporación Monte Calvario en Caguas.
La situación fue denunciada meses atrás a Prensa sin censura por el grupo moderador de la página Dile No Al Crematorio en Puerto Rico en FB.
El área se conoce como Condado Moderno en Caguas Norte. El residencial aledaño es Jardines de Condado Moderno. Está cerca de Plaza Centro, donde operan Walmart y otros comercios, incluso de alimentos procesados.
Detrás del crematorio está lo que fue el Colegio Kiany, conocido hoy como Caguas Private School, cuya dueña es la señora Villanueva.
La Ley 55 de 2006 establece que los negocios de cremación de cadáveres se deben localizar en áreas con zonificación industrial o no zonificadas.
El alcalde Willie Miranda Torres se supone que conoce la ley, pero a juicio de los padres que contactaron a este medio maneja la situación con manos de seda, al igual que la directora del colegio privado. [Extraoficialmente se alega en Caguas que los dueños son donantes de su campaña, aparte de que desembolsan miles por concepto del CRIM y en patentes municipales, como el propio colegio.]
En mayo pasado, durante la cobertura de Prensa sin censura, Miranda Torres reaccionó:
“A raíz de la denuncia realizada en su reportaje sobre la Corporación Cremaciones Monte El Calvario, personal de las Oficinas de Asuntos Ambientales y de Permisos del Municipio de Caguas visitaron las facilidades para la evaluación del área y determinar si procedía realizar algún referido a las agencias del estado que tienen jurisdicción en este tipo de operación. Los inspectores pudieron constatar que la corporación tiene todos sus permisos al día y que el área de operaciones se encuentra ordenada. El permiso de uso que otorga el Municipio es de acuerdo a la calificación de los terrenos. La calificación del predio permite usos comerciales intensos e industriales livianos. A estos efectos, se permite la actividad de cremaciones. Además, durante la inspección se advino en conocimiento que, tras la denuncia pública, el Departamento de Salud también los visitó, por lo que un referido de parte del municipio ya no es necesaria. Quedo a sus órdenes”.
Tras los videos que Prensa sin censura publicó el pasado viernes 8 de diciembre, la dueña del colegio circuló una carta a los padres. Varios la compartieron con este medio independiente. Y la incluimos en la galería de fotos de esta nota de seguimiento.
“En aras de resolver esta situación le informamos que, en el día de hoy, Caguas Private School radicó una querella en el Departamento de Recursos Naturales y Ambientales. En la misma, se solicitó una inspección del área, cuyos resultados permitirán adjudicar responsabilidad, si alguna, en caso de que se confirme la procedencia de los olores y gases”, escribió Ana Villanueva.
Parte de los padres y madres que se comunicaron con Prensa sin censura consideran matricular a sus hijos en otros colegios.
Cuando se incineran cadáveres el humo se esparce por la zona y provoca náuseas, mareos, dolores de cabeza y dificultad respiratoria en los alumnos y algunos maestros, dicho por padres.
Villanueva, que no ha considerado cerrar el colegio hasta tanto clausuren el rancho de cremación, aseguró a este medio que entre 2019 y 2020 radicó querellas que no fueron atendidas. El último día de clases será el 18 de diciembre.
“El olor [realmente peste] de ayer [del pasado viernes 8 de diciembre] fue muy fuerte. Hubo una nube de humo que llegó hasta nuestra cancha de soccer. Hablé con los dueños [Monte Calvario] y les dije de la situación. Tuve que llamar al 911”, puntualizó Villanueva al revelar que la salud de una de sus maestras se vio afectada.
Con la alta incidencia de fallecimientos y bajos costos de la cremación en comparación con un velorio de cuerpo presente, los servicios de incineración de cadáveres son muy solicitados en este lugar.
Pero, según los padres y el personal de seguridad que se comunicaron con este periodista independiente, operan contrario a la Ley 55 porque lo hacen en zona residencial, escolar y comercial.
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