JAIME TORRES TORRES
Periodista y Editor
PRENSA SIN CENSURA
Al finalizar la Eucaristía del domingo 12 de noviembre una hermana distribuyó los sobres para depositar el diezmo.
Parece que, aparte de la adoración a Jesucristo, eso es lo otro que la Iglesia Católica tiene en común con las sectas y denominaciones protestantes.
Eso sucede en la Diócesis Fajardo-Humacao, cuyo territorio abarca desde la Ciudad Gris pasando por Naguabo, Ceiba, Fajardo, Luquillo, Río Grande, Loíza y Canóvanas, incluidas las Islas municipio Vieques y Culebra.
Lo del diezmo diocesano lo estableció el obispo fundador Eusebio Ramos Morales, quien hoy pastorea la Diócesis de Caguas.
Su sustituto es el carmelita Luis Miranda, quien le imparte seguimiento a parte de lo implantado por su predecesor en la diócesis fundada en 2007.
Sin ánimo de polemizar, este periodista consultó los índices del Código de Derecho Canónico, el Compendio de la Doctrina Social de la Iglesia y el Catecismo de la Iglesia y en ninguno de estos textos de la oficialidad aparece el diezmo.
La Diócesis Fajardo-Humacao es pobre y con rostro de adulto mayor, no pocos enfermos. Las comunidades de mayor opulencia en Río Grande, Fajardo y Humacao son exclusivas, quedan en la costa y se distinguen por su lujo y singular atractivo turístico. No todos los residentes son católicos prácticos, aparte de que son itinerantes pues muchos residen en San Juan.
Las feligresías, como en toda la provincia eclesiástica, han mermado por diversas razones, merecedoras de otro artículo.
A nuestro entender, más que el diezmo, que es una práctica del Antiguo Testamento que no es católica, se pudiera evangelizar sobre la Pastoral de la Corresponsabilidad, en que la persona descubre que todo lo que tiene es por Gratuidad Divina y, al comprenderlo, consagra su Tiempo, Tesoro y Talento al Señor.
Es como la ofrenda de la viuda que puedes leer en Marcos 12, 41-44. Los ricos daban en abundancia y una viuda pobre se desprendió de una “moneditas de muy poco valor”.
Versa la Sagrada Escritura que Jesús llamó a los discípulos y les dijo:
“Les aseguro que esa pobre viuda ha dado más que todos los otros porque todos han dado de lo que les sobra; pero ésta, en su indigencia, ha dado cuánto tenía para vivir”.
Antes que el diezmo, evangelización y educación en CORRESPONSABILIDAD.

